Enseña a tus hijos con el ejemplo
Enseñar a tus hijos con el ejemplo es la forma más efectiva de enseñar. Los niños y jóvenes quizá no recuerden lo que les dijiste, bien dicen que las palabras se las lleva el viento, pero ellos aprenden muy bien de las cosas que hacemos buenas o malas y sobre todo de aquellas que hacemos con consistencia.
Un buen ejemplo, es una de las mejores herramientas con las que cuenta un padre para educar a sus hijos. Sigmund Freud, basa parte de su teoría en el hecho de que la infancia determina la vida adulta. Los primeros años de vida son vitales para el desarrollo de tu hijo, por lo que es importante que sepas que, desde que nacen, los niños empiezan a aprender. ¿Sabes cuál es la primera técnica que utilizan para aprender? La observación. Ellos ven cada paso que das, imitan tus actos y siguen tus movimientos.
Los niños son como esponjas, son puros, llegan al mundo con sed de aprender. Tienen corazones limpios que se van ensuciando con todo lo que ven. Si los niños ven violencia en su hogar, ellos aprenden a ser agresivos; si los tratan con indiferencia, ellos aprenden a ser fríos; si ven que tú ayudas a los demás, ellos aprenderán a ser generosos; si los tratas con amor y cariño ellos crecerán con seguridad y autoestima.
Como padres, somos los héroes de nuestros hijos. Es importante que tomemos conciencia de que somos los mejores del mundo para él o ella.
Uno de los valores importantes a enseñar a nuestros hijos es el "compromiso".
Es importante que los niños aprendan que, una vez que han dado su palabra a alguien, se espera que cumplan. Los padres pueden enseñar a sus hijos el "compromiso" a través de ejemplos y dándoles sus propias oportunidades de cumplirlos.
Una forma de enseñar
La forma más fácil de enseñarle a tu hijo sobre "compromiso" es dando el ejemplo. Es decir, cumpliendo tus propios compromisos y mostrarles que significa cumplir con tu palabra. Explícales que los compromisos pueden significar trabajo duro, pero es importante para tu familia que se cumplan los compromisos.
Pongamos algunos ejemplos: compromisos para trabajar, ayudar con la Asociación de Padres de familia de la escuela de tus hijos, ser voluntarios los fines de semana, terminar las tareas domésticas durante la semana, o incluso planes divertidos como comprometerse a una noche de películas con tus hijos una vez por semana, o si tu presupuesto te lo permite quizá un viaje para las próximas vacaciones familiares.
Cualquier cosa, pequeña o grande que te comprometas a hacer, hazla y enséñales el valor del compromiso, así como las repercusiones que se tienen cuando no se cumple con ellos.
Lee y comparte historias
Otra manera de enseñarles acerca del compromiso es el leer y compartir historias sobre "Compromiso"
Tomate un tiempo para hacer explicarles cuando estas leyendo un libro con ellos o viendo una película y los personajes mantienen o no cumplen con un compromiso.
Discute con ellos por qué esto es bueno o malo y cómo la acción de mantener o no cumplir con el compromiso afecta a los otros personajes de la historia. Pregúnteles cómo se sentirían si hubieran sido los desilusionados por el personaje y pregúntales cómo consideran que se pudo haber mantenido el compromiso.
Dales la oportunidad de mantener sus propios compromisos
Después de ver ejemplos, los niños deben aprender a mantener sus propios compromisos. Si aún no lo has hecho, dales compromisos o tareas semanales. Podría ser tan simple como pedirle a tu hijo que se comprometa a mantener su habitación limpia o a una lista semanal de tareas domésticas. Las mascotas son otra forma de ejemplificar el "compromiso". Si tiene una mascota, o está pensando en adquirir una, asegúrese de recordarle a tu hijo que cuidar de su mascota es un gran compromiso. Conseguir un perro, un gato o incluso un hámster requiere años de compromiso para alimentar, lavar, nutrir, amar, recoger después y brindar atención médica.
Otra forma en que los niños pueden hacer sus propios compromisos es ofreciéndose como voluntario semanal o mensualmente, o comprometiéndose a actividades después de la escuela como equipos deportivos o clases de música. Si tus hijos quieren renunciar al compromiso, explícales por qué es importante que perseveren, al menos hasta el final de la temporada deportiva o el recital final de música.
Enseñar y ejemplificar el "compromiso" desarrolla el carácter de tu hijo y desarrolla su sistema de valores mientras les enseña cómo interactuar con otros de una manera fructífera y beneficiosa.
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Alicia, Fernando y Daniel Díaz
Autores
Juntos tienen 30+ años de experiencia en productividad, liderazgo y mejora contínua entre otros. Su pasión es ayudar a otros a objener resultados enfocando su tiempo en lo importante y manteniedo balance entre su vida personal y su profesión.